- Para evitar la contaminación de la superficie pasiva con partículas de acero al carbono, todas las herramientas utilizadas con acero inoxidable deben estar dedicadas “exclusivamente al acero inoxidable”.
- Si se utilizan uniones mecánicas (con tornillos, pernos, arandelas o remaches) con otros metales, el acero inoxidable se debe separar mediante arandelas o forros no metálicos, como neopreno o plástico, para evitar la posibilidad de corrosión galvánica.
- Debe evitarse el contacto entre el acero inoxidable y cualquier disolución que contenga cloro, como hipoclorito, cloruro, ácido clorhídrico entre otros. En caso de contacto accidental debe limpiarse, inmediata y preferiblemente con agua des-ionizada.